Logo DV BLANCO

RETO COVID-19

RETO COVID-19

Tipo de proyecto: Concurso

Año: 2020

En el año 2019, la aparición de una nueva cepa de virus (SARS-CoV-2) desembocó en una pandemia de escala mundial. Pero no solo las relaciones internacionales fueron afectadas, sino también el funcionamiento interno de las naciones y la manera en que los mismos individuos interactúan entre ellos mismos y con su medio.

En el caso colombiano, las inicialmente estrictas medidas de confinamiento han ido transformándose progresivamente en recomendaciones sanitarias, toda vez que la una cuarentena indefinida se antoja económica y socialmente inviable. Sin embargo, lo que los líderes políticos han definido como una “economía de emergencia” en la que se prioriza el abastecimiento de alimentos y productos de primera necesidad se ha visto afectada por crisis como el brote epidemiológico en la central de abastos de Bogotá, y la consiguiente imposibilidad de efectuar la compra/venta de los productos por parte de la ciudadanía.

Por esta razón y en el marco de la iniciativa “Reto COVID-19” promovida por la «SOCIEDAD COLOMBIANA DE ARQUITECTOS», se propone una estrategia de reactivación económica a dos niveles. A nivel barrial, se propone la identificación demuelles” o lotes de oportunidad dentro de los perímetros urbanos, que por sus condiciones físicas permitan la implantación de lascápsulas” de esta propuesta. Estos muelles serán espacios abiertos que permitan adaptar un cerramiento a modo de control del acceso y con el fin de facilitar la vigilancia de las “cápsulas” y de los productos las 24 horas del día. Estos espacios podrán ser parqueaderos, coliseos o cualquier otro espacio de naturaleza similar que estén actualmente en desuso por cuenta de la actual contingencia.  

Una vez identificado el espacio, se propone la definición de un circuito de circulación unidireccional (evitando de esta manera el cruce de flujos peatonales). Este circuito deberá contar con puestos de control biológico en el acceso. A lo largo del circuito se deberán demarcar en el suelo las distancias mínimas de aislamiento entre individuos. De igual manera y con el objetivo de incentivar el uso de la bicicleta como el medio de transporte de mayor seguridad biológica, el muelle deberá contar con cicloparqueaderos en números acordes con el tamaño y la ocupación prevista del “muelle”.

Para la localización de las “cápsulas” se propone una distribución intercalada, de manera tal que dos accesos a una cápsula no se ubiquen de manera adyacente. Las “cápsulas” son domos geodésicos autoportantes cuya estructura se construirá en el sitio a partir de cañas de guadua y uniones en acero. El cerramiento de los espacios resultantes se elaborará a partir de una película de plástico de alto calibre similar al empleado en los invernaderos reforzada en sus aristas. La elección de estos sencillos materiales busca lograr un bajo costo económico de la construcción y a la vez involucrar a los vendedores dentro de los procesos de manufactura de los domos. De la misma manera, el mobiliario diseñado para soportar la actividad comercial será de bajo costo y podrá ser elaborado a partir de madera reciclada. Las dimensiones del mobiliario deberán garantizarse, toda vez que este está diseñado para ser completamente compatible con las dimensiones propuestas para las cápsulas.

Finalmente y una vez superada la pandemia, todas las estructuras construidas podrán seguir siendo utilizadas para mercados locales mediante la reconfiguración del esquema de distribución de las cápsulas (optimizando la ocupación al disminuir la necesidad de aislamiento) o desensambladas en sus partes constitutivas (uniones en acero y cañas de guadua) para su posterior aprovechamiento en otro proyecto.

In 2019, the appearance of a new virus strain (SARS-CoV-2) led to a worldwide pandemic. But not only international relationships were affected, but also the internal functioning of the nations and the way in which the same individuals within the same nation interact among themselves and with their environment.

In the Colombia, the initially strict containment measures have been progressively transformed into sanitary recommendations since an indefinite quarantine seems economically and socially unfeasible. However, what political leaders have defined as an “emergency economy” in which the supply of food and basic necessities are prioritized, has been affected by crises such as the epidemiological outbreak in the Bogotá central supply, and the consequent impossibility of making the purchase / sale of the products by the citizens.

For this reason and within the framework of the “Challenge COVID-19” initiative promoted by the «COLOMBIAN ARCHITECTS SOCIETY», a two-level economic recovery strategy is proposed. At the neighborhood level, the identification of «docks» or lots of opportunity within the urban perimeters is proposed. The “docks” must allow the implantation of the «capsules» of this proposal due to their physical conditions, such as being open spaces that allow to adapt an enclosure as an access control and overall security of the «capsules» and it´s products 24 hours a day. These spaces may be parking lots, coliseums, or any other space of a similar nature, that currently have no use due to the current contingency.

Once the space has been identified, the definition of a one-way circulation circuit is proposed (thus avoiding the crossing of pedestrian flows). This circuit must have biological control areas at the access. Throughout the circuit, the minimum isolation distances between individuals should be marked on the ground with paint. Likewise, and with the aim of encouraging the use of bicycles as the means of transport with the greatest biological safety, the dock must have parking cycles in a quantity according to the size and expected occupation of the «dock».

For the location of the «capsules» an interleaved distribution is proposed, so that two accesses to a capsule are not located one next to the other. The “capsules” are self-supporting geodesic domes with a structure built on site from guadua canes and steel joints. The enclosure of the resulting spaces will be made from a high-caliber plastic film reinforced on its edges like that used in greenhouses. The choice of these simple materials seeks to achieve a low economic cost of construction and at the same time to involve vendors in the manufacturing processes of the domes. In the same way, the furniture designed to support the commercial activity will be low cost and may be made from recycled wood. The dimensions of the furniture must be guaranteed, since it is designed to be fully compatible with the dimensions proposed for the capsules.

Finally and once the pandemic is over, all the structures built can continue to be used for local markets by reconfiguring the distribution scheme of the capsules (optimizing occupancy by reducing the need for insulation) or disassembled into their constituent parts (steel joints and guadua canes) for later use in another project.